LA DOLORES ANIMA EL TURISMO EN CALATAYUD


Santiago Cabello.-
El reclamo de La Dolores y su rehabilitado mesón ha funcionado. Más de 150 turistas diarios de medio (contando sólo los que han pasado por las oficinas de turismo) entre los meses de junio y septiembre han animado las calles de Calatayud y han dejado sustanciosos beneficios en sus establecimientos hosteleros. Y es que La Dolores y su leyenda se han convertido en el reclamo turístico que soñaron los responsables municipales cuando hace unos años decidieron rehabilitar el mesón y convertirlo en una moderna hospedería.
La cifras no engañan: los meses de junio, julio, agosto y septiembre han aumentado considerablemente las consultas en las diferentes oficinas turísticas de la ciudad. Además, la ocupación hotelera ha arrojado mejores porcentajes que en los mismos meses del año anterior. Y eso que en 1998 no tenían que competir con las 34 habitaciones del Mesón de La Dolores. Y es que al analizar los datos se da por seguro que la apertura el 1 de junio de 1999 de la hospedería bilbilitana ha animado a muchos turistas a acercarse a Calatayud para visitar este monumental espacio y sumergirse en pos del mito que universalizó el nombre de la capital del Jalón. Pero es que, además de aumentar en número de visitantes se ha conseguido romper con la dinámica de las visitas de paso. Durante este verano ha aumentado el número de pernoctaciones, convirtiendo a Calatayud en destino turístico de fin de semana.
Esperanzador comienzo.
Los resultados de la hospedería del Mesón de La Dolores no pueden ser más esperanzadores. Cuando aún no han transcurrido cinco meses desde su apertura las cifras de clientes tanto de su restaurante como del hotel no pueden ser mejores. Así, según explicaron responsables de la empresa concesionaria, en las habitaciones han tenido una media de ocupación del 75%, habiendo colgado el cartel de completo durante las fiestas de San Roque y la Feria de septiembre. La ocupación ha bajado un poco tras los meses de verano estando ahora cercana al 50%. Por lo que respecta a los resultados del restaurante del mesón, en estos meses se han servido casi 17.000 comidas, la mayoría a la carta, lo que representa que además de los turistas, han pasado por él buena parte de los bilbilitanos y gentes de la comarca.
Los extraordinarios datos del Mesón de La Dolores no han supuesto un descenso de la clientela del resto de establecimientos de la ciudad. Bien al contrario, desde que abrió el mesón todos ellos han aumentado sus índices de ocupación. Así, en junio superaron el 80% de media, en julio el 66% y en agosto casi alcanzaron el 90%.
Para el concejal delegado de Turismo, Manuel Micheto, los datos no pueden ser más positivos. "Estoy muy satisfecho de los resultados -indica- que empiezan a poner el listón muy alto para ser una ciudad de interior sin tradición turística". Micheto se muestra convencido de que los datos no reflejan la totalidad de los visitantes que este verano han elegido Calatayud. "Muchos de los turistas -explica el concejal- han acudido directamente al mesón, donde se las ha facilitado todo tipo de información turística, pero donde hasta ahora no recogían datos acerca de los visitantes". Según el edil, "a partir del 1 de enero los responsables de recepción del mesón recabarán los mismos datos que pedimos a los turistas en las oficinas de turismo".
Una cifra que puede avalar las tesis del concejal es el hecho de que por el museo de La Dolores hayan pasado desde su apertura el 1 de septiembre casi 5.000 turistas.
Los datos
En lo que v a de año, más de 25.000 personas han consultado o visitado las oficinas turísticas de Calatayud y Bílbilis, 2.000 más que en el mismo periodo del año anterior.
Agosto es el mes de mayor número de consultas (7.630) seguido de septiembre (4.293) y junio (4.217).
A estas cifras hay que añadir los turistas que no pasan por la oficina de turismo y los que han recabado información directamente en el Mesón de La Dolores.
Por lo que respecta a la ocupación hotelera, agosto sigue siendo el mejor mes (90% ocupación media) seguido de junio (82%) y julio (67%), sin que se conozcan aún los datos de septiembre.
La mayoría de las estancias son de una noche (fines de semana), aunque existe un tráfico importante de clientes de empresas (lunes a viernes).
La tasa de ocupación de los meses de verano ha aumentado sensiblemente en todos los hoteles.
Vida para el caso antiguo
Las iniciativas municipales para convertir el caso antiguo de Calatayud en un espacio vivo están cumpliendo poco a poco con su objetivo. El Ayuntamiento se empeñó en sacar al conjunto histórico artístico de la ciudad del estado de abandono en el que se había sumido con los años. Así, las casas vacías y en ruina, los comercios cerrados y los monumentos abandonados están dejando paso calles y plazas recién arregladas, a monumentos recuperados y al retorno de la vida al corazón de la ciudad. Las medidas adoptadas como la rehabilitación del Mesón de La Dolores, del Ayuntamiento antiguo, de San Pedro de los Francos o de Santa María; la construcción de viviendas sociales; la apertura de servicios en el caso antiguo (sede de la DGA, Juzgados, Centro de Día 3ª Edad, Mercadillo) y la instalación de nuevos comercios y oficinas han contribuido a dar vida al Calatayud de antaño.

Heraldo de Aragón (31-10-99)